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domingo, 31 de enero de 2010

Con el dinero desperdiciado del Plan E se habría eliminado el déficit sanitario

Según la entrevista en La razón del 31 de enero de 2010, dice Ana Pastor: «Con el dinero desperdiciado del Plan E se habría eliminado el déficit sanitario» «El Gobierno ha actuado de forma irresponsable al liberalizar la píldora». La Vicepresidenta del Congreso y referente sanitario del PP, Pastor hace balance del Gobierno del PSOE en Sanidad.



¿Cómo valora la política sanitaria del Gobierno?

-El balance socialista, con ministros distintos, es muy pobre. Seis años después sigue sin solucionarse la sostenibilidad de la Sanidad, con un déficit de financiación de más de 6.000 millones. Tampoco se ha avanzado ni en el desarrollo de la Ley de Ordenación de las Profesiones ni en la troncalidad ni en las especialidades de enfermería ni en las pasarelas ni en el registro de los profesionales. En esta parcela ha habido mucha foto y poco contenido.
-Entonces, en Sanidad se ha hecho nada o muy poco.

-Ni en la sostenibilidad ni en los profesionales... ni en la prevención. Nosotros llevábamos en el programa que un 25% del gasto se destinaría a prevención. No se ha avanzado en este terreno. Hay que poner en marcha la prevención del cáncer de colon y todo lo relacionado con el «screening» del cáncer de cuello de cérvix. Lo mismo podríamos decir de las campañas de prevención: no hemos conocido ni una sola, mientras crece el número de jóvenes fumadores, lo cual nos lleva a preguntarnos qué política de prevención ha habido. Y otra parte importante es la investigación. Sanidad se ha visto privada de sus competencias y no hay una estrategia. Proponemos la creación de un Centro Nacional de Investigación Tecnológica Sanitaria. Además, hay que avanzar en la evaluación de la calidad para garantizar la equidad. Hay desigualdades en el acceso a los servicios.

-¿Se ha roto más la equidad?

-No avanzamos en la cohesión. No es de recibo que un fármaco tenga distinta accesibilidad en unas comunidades que en otras. Navarra cuenta con un plan de deshabituación tabáquica con acceso a los medicamentos para los fumadores. Otras autonomías, no.

-¿Qué le parecen los planes del Gobierno sobre el tabaco?

-Nuestro país no puede permitirse 50.000 muertes al año por el tabaco y que muchas personas enfermen. Y para ello hay que convencer a los fumadores de que dejen de serlo, ofertando en todos los centros de salud planes para la deshabituación, y planteándonos la incorporación al vademécum de los fármacos que ayudan a dejar de fumar. El otro problema es la incorporación de los jóvenes al hábito tabáquico, porque la UE refleja que no se ha avanzado, sino todo lo contrario. Con respecto a la ley, queremos ver un texto legislativo para pronunciarnos, porque, a día de hoy, no lo hay: se parece a la Ley de Economía Sostenible, todo el mundo hablaba de ella pero nadie la había visto. Nuestra postura es que la propuesta no venga de un grupo, sino a través del Consejo de Ministros y con informe del Consejo Interterritorial de Salud, para no obviar a las autonomías.

-¿Permitirá el PP fumar en las bodas si llega al Gobierno?

-El PP no hace eslóganes ni anuncios. Cuando ha tenido la oportunidad de gobernar, gobierna.

-¿Qué le parece el papel de Sanidad con respecto a la píldora?

-Ya mostramos nuestra oposición tras el anuncio de su venta sin receta. Nadie entiende que las niñas se automediquen. Ahora, los datos nos dan la razón. Cuando gobernemos las menores tendrán acceso a fármacos, pero con prescripción y con historia clínica; es decir, la píldora se prescribirá.

-¿Ocultó Sanidad el riesgo de tromboembolismo venoso?

-Algunos han cambiado de criterio en los últimos meses. Debo ser de las pocas que siguen diciendo lo mismo. Me gustaría que el Ministerio cambiara de criterio con el conocimiento que todos tenemos del fármaco. El Gobierno ha actuado con irresponsabilidad.

-Hay autonomías que en verano no tendrán fondos. ¿Hace algo Sanidad para resolverlo?

-Todos los españoles conocen los Planes E de Zapatero. Si un sector público necesita recursos es la Sanidad. Sería muy positivo que dentro del pacto por la Sanidad hubiera un Plan S de sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud. El Gobierno se tiene que plantear qué salida le da a la Sanidad. Todos los ciudadanos han conocido bien cómo se pueden destinar recursos en muchos casos a obras que no son necesarias ni prioritarias, pero nadie entiende por qué no se destinan a la Sanidad. La Sanidad es un pilar del Estado de Bienestar.

-¿Qué opina del primer borrador del Pacto por la Sanidad?

-Es un documento que analiza, pero que no se moja. Con él no se avanzaría nada, como han señalado los consejeros de Salud.

-¿Es un hito histórico que el gasto en fármacos crezca un 5%, cuando la economía decrece un 3%?

-Defiendo que la subida del gasto en fármacos sea acompasada al crecimiento de la riqueza y de los recursos destinados a la financiación del sistema. El PP apuesta por la innovación y por una política de precios de referencia para los medicamentos que han perdido la patente. No defendemos las bajadas de precios lineales. Queremos un sistema de farmacias que dé seguridad a los medicamentos y la actualización del Decreto 5/2000. Pero voy a replantearle la pregunta: con el PP, la economía crecía, bajaban los impuestos y el gasto sanitario pasó de 436 euros por persona al año en 1996 a más de 1.100 en 2004. Aquí lo que ha habido es una mala política económica y un Gobierno nada progresista, el de Zapatero, que ha permitido que la Sanidad esté en déficit.

-¿Privatiza el PP en Madrid?

-No. Lo que ha hecho Esperanza Aguirre es priorizar la política sanitaria, invertir en Sanidad y mejorar su calidad.

Perfil

Un referente para el sector

Dejó huella en la Dirección general de Muface y marcó toda una época histórica al frente del Ministerio de Sanidad y Consumo. Por ello y por el conocimiento enciclopédico que atesora del sistema sanitario, la actual vicepresidenta del Congreso sigue siendo uno de los grandes referentes del sector, lo que convierte su despacho en un lugar de peregrinaje de los médicos más ilustres, las compañías biomédicas más punteras y los farmacéuticos más granados de toda España. Ana Pastor es la fuente sanitaria en la que bebe su partido, pero también es respetada y temida en el bando rival, el PSOE, y en los partidos nacionalistas, lo que dice mucho de su extensa trayectoria. Seis años después de su salida del Ministerio, se cuentan con los dedos de la mano los agentes del sector que no ensalzan su labor y no elogian su manera de actuar. Siempre fiel a Mariano Rajoy, hoy coordina también la Política Social del PP.

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